LA NETA.
Siempre mira por detrás de algo que nunca pudo definir Lo contingente de sí es obligado a vivir en el encierro de la represión Hoy el cielo es oscuro, bañando con la humedad de la incertidumbre, La materia que contempla desde el fondo las alturas de lo inalcanzable. El encierro cotidiano concluye con espermatozoides cansados, Chateando frente al espejo del conformismo. Toma la camisa de trabajo para limpiar los fluidos de un cuerpo cansado. Pierde su mirada en el grifo de la ducha. Piensa. Por qué dejar correr el agua, la que no me limpia. Es obstinada y muy caprichosa, que gran mentira la del Jordán. Reflexiona. Que perverso puede ser un corazón solitario, Y riéndose dejo que el agua tibia le acariciara las heridas. Cerró los ojos y se remonto a lo infinito de su conciencia dejando que la matriz primigenia le dijera que hacer frente al problema. Paso horas en ese lugar de silencio queriendo encontrar una definición para lo que hay de tras. Luego de ver su cuerpo opaco y gris dijo… Lib...